Los secadores de adsorción siempre se aplican donde se tiene que secar aire comprimido o gases a un punto de rocío a presión de -40° C o a -70° C opcionalmente. El tamaño de un secador de adsorción se determina siempre en función del caso de aplicación concreto teniendo en cuenta factores decisivos como el medio, el caudal volumétrico, la presión de servicio, la temperatura de entrada y el punto de rocío a presión requerido.
Los secadores de adsorción regenerados en frío HANKISON cubren un rango de caudal volumétrico de 9 m³/h a 9300 m³/h inclusive. En todos los secadores de adsorción de las series DKC, HHL y HHS, HANKISON aplica alúmina activada como desecante. La alúmina activada adsorbe agua sin modificar la forma o las propiedades. Se adsorben sobre
todo con gran fuerza las moléculas con una elevada polaridad. Como el agua posee una elevada polaridad, la alúmina activada está especialmente indicada como desecante. A través de su gran resistencia química, la alúmina activada es resistente al agua líquida.
Un secador de adsorción extrae la humedad del caudal de aire comprimido durante la adsorción, el aire comprimido entra en la parte inferior del adsorbedor y éste vuelve a salir por el extremo superior del depósito.
Los secadores de adsorción cuentan normalmente con dos depósitos de desecante, uno se encuentra en la fase de adsorción y el otro en la fase
de regeneración.